Complejidad y futuro humano
La construcción de lo humano se desarrolla inmersa históricamente en una corriente de complejidad creciente. Algo donde los reduccionismos de cualquier tipo pueden tener su momento de esplendor. Aunque indefectiblemente se ven superados por la realidad misma del tejido de su acontecer. La grandeza y la miseria del hombre discurren entrelazadas en una especie de vórtice evolutivo. En una espiral dicotómica de construcción y destrucción, de la cual no se alcanza nunca a divisar el punto focal. Aún así, en medio de la duda, la constante es la curiosidad del hombre. Su deseo de saber hacia dónde camina su devenir.
Algunas mentes preclaras – como el jesuita Pierre Teilhard de Chardin – han querido adivinar en el ojo de semejante huracán una concentración trascendente de la sensibilidad. La conciencia, la ciencia y la educación humanas, conviertiéndose así en «germen del nuevo paradigma de la complejidad, de la evolución o de la universalidad«. (Agudelo [1]) El concepto reduccionista del modelo científico dominante donde «la racionalidad es una característica del propio universo, razón por la cual debe ser abarcable y explicable mediante el método científico«. (Bermejo [2]) Y no es siempre compartido en su totalidad.
Aunque no podamos negar a la ciencia su estatus de guía en la exploración del universo. Ni su demostrada capacidad para iluminar la oscuridad de nuestro entendimiento. Aún así, tampoco deberíamos convertirla en las nuevas tablas de la ley. El conocimiento científico es ciertamente un instrumento eficáz para explorar con éxito creciente la oscuridad que rodea nuestra evolución como especie. Pero no debemos olvidar que se sustenta en unas suposiciones. Y éstas son válidas únicamente mientras no surjan otras mejores.
Complejidad y futuro humano. Nuevos paradigmas
Así señala Bermejo que «la cosmología estándar [..] es simplemente un relato, una narración, que pretende sentar las bases de una nueva historia global del universo«. En este mismo sentido señala Stahel [3] la trascendencia del lenguaje en la configuración de la acción y de la comprensión humana del universo y de sí mismo, proponiendo un pensamiento complejo ampliado, capaz finalmente de aglutinar las verdades parciales encontradas por las particulares ramas del saber.
Si el ser humano pretende algún día controlar la vorágine de su avance en espiral en la corriente histórica, deberá comenzar un diálogo multidisciplinar, abierto, respetuoso y constructivo. Habrá de ser capaz de encontrar un lenguaje integral, no sólo capaz de aglutinar los avances de todas las ramas del saber, sino también de convertirse en un medio más eficaz de creación de su propio futuro. Esta necesidad no aparece únicamente el ámbito de la ciencia moderna, sino que la podemos escuchar también en el terreno de la gobernanza: «la necesidad de un nuevo conjunto de instituciones capaces de gobernar la complejidad de los contextos, concebidos como producto social, donde pueden chocar intereses en conflicto debido a las distintas visiones y modelos» (ILC [4]).
El futuro humano dentro de la complejidad reclama nuevos paradigmas alejados del oscurantismo, pero igualmente abiertos al diálogo y a la construcción de discursos creativos, donde no se desprecie a nadie por presentar nuevos planteamientos, pues como expresa Aguirre [5]: «En la ciencia hay hechos qué pueden ser reconocidos como muy improbables, no obstante, ello no significa que los mismos sean imposibles«. En ese marco de discurso habrán de respetarse y estudiarse tanto la evolución hacia una nueva complejidad orgánica de la que habla Aguirre como la construcción de un ente global trascendente más próximo a las tesis de Teilard de Chardin. En el fondo lo verdaderamente importante debería ser evolucionar hacia algo mejor para todos, sin exclusiones y con independencia de la forma final propuesta.
Fuentes
[1] Agudelo y Agudelo.- [reseña en línea] El Universo sensible. Reseña por Agustín de la Herrán Gascón. [consultado:15/02/2014] [enlace externo]
[2] Bermejo, J.C.- [en línea] Historicidad y pseudo-historicidad del universo: un análisis del concepto de simultaneidad. Historiografías, 5 (Enero-Junio, 2013): pp.107-117.Universidad de Santiago de Compostela. España. [consultado:15/02/2014] [enlace externo]
[3] Stahel, A.– [en línea] Complejidad y Ciencias Sociales. Colaborador de la Cátedra UNESCO de Sostenibilidad de la UPC. [consultado:14/02/2014] [enlace externo]
[4] ILC.- Foro global de la tierra 2013.[consultado:14/02/2014] [enlace externo]
[5] Aguirre, C.- Una refutación a la refutación de la complejidad irreductible. [consultado:14/02/2014] [enlace externo]